Celta 1 - 0 Cartagena

lunes, 22 de febrero de 2010

Celta 1 - 0 Córdoba



El Celta logra 3 puntos de oro ante el Córdoba

Celta: Falcón, Vasco, Noguerol, Túñez, Roberto Lago, López Garai, Jonathan Vila, Trashorras (Iago Aspas, min.72), Papadopoulos (Dani Abalo, min.75), Botelho y Joselu.

Córdoba: R. Navas, Gaspar, Pepe Díaz, Asen, Gerardo, Carpintero (Simón, min.70), Jorge Luque, D. Lizio (Juanjo, min.56)), M. Dañobeitia (Scotti, min.56), Agus, Fuentes.

Goles: 1-0, min.41: Joselu (Cellerino, min.62)

Árbitro: Hernández Hernández, del comité canario. Amonestó a Túñez, Jonathan Vila, Papadopoulos, Gerardo, Agus, Gaspar.

Campo: Estadio de Balaídos, 8.205 espectadores.


CRÓNICA

El Celta consiguió tres valiosos puntos ante el Córdoba, en un partido que no pasará a la historia del fútbol, y donde el Celta volvió a mostrar los mismos problemas ofensivos de las últimas jornadas, y también, eso sí, la misma seguridad defensiva de la que viene haciendo gala en los últimos partidos.

Eusebio apostó por Trashorras en la mediapunta y dejó a Aspas en el banquillo de inicio, y dio la alternativa a Jonathan Vila como se anunciaba en la previa del partido. La alineación fue la esperada por el trabajo realizado durante esta semana, con Botelho como interior zurdo, alternándose mucho con Trashorras en esa posición por la tendencia del brasileño a caer al centro del campo.

El guión del partido fue muy similar al de choques anteriores. El Celta salió de inicio a por el partido, como es habitual, buscando ventajas en acciones combinativas, basándose especialmente en la velocidad de Botelho, que disputó unos primeros 20 minutos primorosos, siendo protagonista de todas las acciones celtiñas y convirtiéndose en el mejor jugador del primer tramo del partido.

El Córdoba fue más que nunca un equipo "Made in Alcaraz", muy ordenadito en defensa, replegado y buscando alguna acción a la contra para adelantarse y no permitir que se juegue al fútbol. Tras los primeros minutos de acoso celtiña, con buenas ocasiones de Botelho y una de Joselu que marró incomprensiblemente, llegó la calma. El Córdoba se encontraba cada vez más cómodo y consiguió encerrar al Celta en su propia área con un arreón tibio pero suficiente para anular al Celta.

Trashorras contactaba poco con el balón, Jonathan Vila estaba demasiado incrustado en la defensa celtiña y la batalla del medio del campo se ganaba más por fuerza que por técnica. El partido era perfecto para el Córdoba, que con tal de estar ordenado, estaba conteniendo el Celta, hasta que, a 5 minutos del descanso, Papadopoulos aprovechó un fallo de un defensa rival para habilitar a Vasco Fernandes, este llegó casi a la linea de fondo y centró para que Joselu, con bastante fortuna, llevase el balón al fondo de las mallas.

Tras la reanudación, el Celta se mantuvo firme en defensa ante los tímidos ataques cordobesistas, que mostraron todas sus debilidades cuando el viento no va a favor. Resulta increible que este equipo, si juega siempre así, tenga actualmetne 32 puntos y navegue en una posición relativamente cómoda en la tabla.

Poco o nada hizo el conjunto andaluz para intimidar al Celta. En la segunda mitad no fueron capaces de generar peligro más que en algún balón colgado al área, donde el peligro real era más la torpeza de la zaga celtiña que el acierto de los cordobeses.

En esta parte, incluso el Celta gozó de más ocasiones en alguna contra bien llevada por Papadopoulos, muy activo todo el partido. A la hora de realizar los cambios, Eusebio solo hizo cambio de cromos. Dio entrada a Cellerino, que tuvo un debut bastante discreto entrando en sustitución de Joselu. Los otros dos cambios fueron Aspas por un cansado Trashorras y Dani Abalo, que entró en sustitución del golpeado Papadopoulos.

El partido se fue muriendo, siendo el gran mérito del Celta haber conseguido que el partido se jugase casi toda la segunda mitad en campo contrario. Ahí si consiguió el Celta hacerse con el medio del campo, gracias en parte al gran trabajo de López Garai, que por algo es titular indiscutible en este equipo.

Resumiendo, una victoria importantísima para el Celta, mucho más teniendo en cuenta los resultados de nuestros rivales en esta jornada. Salvo el Cádiz, ganaron todos. Ganó el Real Unión, el Murcia, el Girona y el Huesca, y el panorama de la lucha por el descenso cambia notablemente, con ciertos equipos con los que no se contaba y empiezan a verle las orejas al lobo.

jueves, 11 de febrero de 2010

Celta 0 - 0 Salamanca

Celta: Falcón, Vasco, Noguerol, Túñez, Roberto Lago, Garai, Bustos, Iago Aspas (Danilo, min.76), Dani Abalo (Botelho, min.65), Michu (Papadopoulos, min.59) y Joselu.
Salamanca: Biel Ribas, Sito Castro, Sevilla (Álvaro, min.68), Murillo, Raúl Gañán, Goikoetxea, Kike (Quique Martín, min.73), Hugo Leal (Endika, min.86), Cuéllar, Totti y Liñares.
Árbitro: Miranda Torres, del comité catalán. Amonestó a Botelho, Hugo Leal, Sito Castro,
Campo: Balaídos, 10.302 espectadores.

CRÓNICA
El Celta mereció más este domingo ante el Salamanca, pero sin marcar goles es imposible ganar partidos. Con éste, el Celta encadena su tercer encuentro consecutivo sin marcar. Y eso que en el partido de hoy, gozó de ocasiones para ganar el partido.
Eusebio sorprendió, no con la alineación, pero sí con su decisión de dejar fuera de la convocatoria a Trashorras. De entrada realizó bastantes cambios con respecto al equipo que habitualmente viene jugando en Liga. Cambió a los centrales Catalá y Jordi para dar entrada a Noguerol y Túñez y dejó en el banquillo a Hugo Mallo para dar entrada a Vasco.
En medio campo la pareja de siempre Bustos y Garai, era acompañada por Iago Aspas, mientras en la delantera regresó Abalo a la titularidad por banda derecha, Michu por la izquierda y Joselu en punta.
El Celta salió con mucha fuerza, decidido a poner el marcador a su favor desde los primeros minutos. Era quién tenía el balón y quién más acercamientos al área rival tenía, pero estos eran demasiado tímidos, demasiado inocentes para inquietar a Biel Ribas.
Por contra, el Salamanca no era capaz de crear ocasiones en jugadas, pero sí a balón parado. Ahí provocaban la zozobra de la zaga celtiña... y de Balaidos, que temía por el gol rival. Primero con una falta en la que Falcón casi se mete en su propia portería y después con una falta que acabó en gol pero fue anulado por fuera de juego al conjunto charro.
El Celta seguía a lo suyo, creando ocasiones con cierta continuidad, especialmente por la banda de Abalo, siempre dispuesto a mostrarse, siempre con ganas, aunque casi siempre desafortunado.
El Salamanca bastante hacía con defenderse. Renunciaba al balón, un poco por impotencia. El Celta lo tenía y cuando lo perdía ejercía una presión axfisiante que impedía al Salamanca saber qué hacer con él. Tampoco es que le preocupase mucho, entrengando el balón, aprovechaban para cerrar espacios.
Una genialidad de Iago Aspas, que regateó dentro de área rival a varios defensores hasta plantarse delante del meta. No resolvió bien, pero la jugada levantó del asiento a los aficionados. Y más que se levantarían cuando a escasos minutos de la finalización de la primera mitad, el propio Aspas saca el compás para dar un pase en profundidad perfecta Abalo, el arousano encaraba la meta rival y era derribado por Sito Castro al borde del área rival. La grada pidió roja directa, pero Mirando Torres, uno de los arbiros menos malos de Segunda, optó por la amarilla. La jugada ofrece lugar a la discusión y el debate. ¿Era el último jugador? ¿Era ocasión clara de gol? Lo cierto es que si no es parado en falta, tenía muchas opciones de marcar.
El partido llegó al descanso con la sensación de que el Salamanca se había ido vivo, y la segunda parte comenzó con más de lo mismo. El partido se enfriaba poco a poco, y Eusebio le dio calor dando entrada a Papadopoulos en lugar de Michu. El griego mostró mucha lucha y dejó buenas sensaciones jugando en ambas bandas.
Joselu tuvo la mejor ocasión del partido, pero se volvió a encontrar con el palo, siempre en la misma portería, ya maldita para el dezano. Deciamos que Papadopoulos había jugado por ambas bandas, y es que empezó en la izquierda, pero cinco minutos después pasó a la banda derecha cuando Botelho entró en sustitución de Abalo. El brasileño se situó en la zurda y el griego en la diestra.
Fue tras la entrada de Papadopoulos cuando el Celta vivió sus mejores momentos en la segunda mitad, con algunas ocasiones, aunque sin acabar de concretarlas. Daba la sensación de que el Celta, por mucho que dominase, no sería capaz de marcar ni un solo gol.
Pero el Salamanca, agazapado, no renunciaba a la victoria en alguna contra. Y tuvo alguna ocasión, especialmente una en la que Falcón estuvo felino para desviar un buen remate de cabeza.
La entrada de Danilo a quince minutos del final poco cambió el discurso. A uno le cuesta entender porque el sustituto de Aspas tiene que ser Danilo y no Trashorras, que ni tan siquiera estaba en el banquillo. Resulta dificil saber que hubiese sucedido si entrase Trashorras, pero desde luego, no nos iría peor que con Danilo.

jueves, 4 de febrero de 2010

Celta 1-3 Ourense



Cellerino y Papadopoulos debutan ante el Ourense



Combinado Celta: Hortal, Peña, Ortega, Carlos David, Iván, Bustos, Jota, Denís, Pedro Vázquez, Papadopoulos y Cellerino. También jugaron Jito, Kevin, Aitor, Candela, Sergio, Borja, Jordan y Marcos.


Ourense: Berto, Yosu, Germán, Álex, Oli, Bruno, Arenas, Nuno, Martín, Jaime y Barreal. En la segunda mitad jugaron Pablo, Rafa, Gonzalo, Padrón, Antonio, Sanginés, Ismael y Yebra.


Goles: 0-1, min. 26: Martín; 0-2, min.65: Antonio; 1-2, min.76: Papadopoulos; 1-3, min.84: Sanginés.

Campo: Barreiro, unos 700 espectadores.

Árbitro: Costas Soto.


CRÓNICA

El amistoso entre un joven combinado de Celta y el Ourense dejó las dos imágenes más esperadas: Las de Cellerino y Papadopoulos con la camiseta celeste y un gol de uno de ellos. El griego, que disputó los 90 minutos, acertó con un cabezazo a la salida de un córner. El cuadro visitante ganó por un gol a tres.


Buen inicio del Ourense, cuyo mayor acoplamiento le permitió superar en el arranque a un jovencísimo Celta en el que, en esta primer mitad, las referencias eran Bustos, Sergio Ortega y, como no, Cellerino y Papadopoulos, centro de atención en este encuentro amistoso que congregó a un buen número de aficionados en Barreiro. Se trataba de dotar de minutos a estos futbolistas y de que los jóvenes canteranos célticos mostrasen sus cualidades.


Los visitantes llegaban con mayor soltura arriba y obligaron a intervenir a Hortal en un par de ocasiones. Con el partido ya más igualado, a los 26 minutos de juego, acertó el Ourense a la salida de un córner que Martín desvió a la red. El combinado celeste buscó la reacción con la movilidad de Cellerino y las incorporaciones de los centrocampistas, pero sin la finalización adecuada.


Tras la reanudación, el Celta, ya con ocho juveniles y Ppadopoulos de ‘nueve’, aumentó el ritmo y se alejó de su portería. Pedro Vázquez y Denís dispusieron de sendas ocasiones en el arranque. Los celestes dominaban el encuentro y buscaban con ahínco el empate, que pudo llegar con un remate de Aitor a los 18 minutos tras una buena combinación en ataque.


Sin embargo, el Ourense fue el que golpeó en una contra dos minutos después. Antonio acertó en un buen remate en el área y amplió la ventaja de los visitantes. Los celestes recortaron con la imagen más esperada de la tarde, un gol de Papadopoulos. El griego, que disputó los 90 minutos, cabeceó a la red a la salida de un córner a los 31 minutos de juego para satisfacción de la poblada grada de Barreiro. Sanginés certificó en una contra la victoria del Ourense a falta de cinco minutos para el final.

lunes, 1 de febrero de 2010

Numancia 0 - 0 Celta


Falcón salvó un punto para el Celta 31/01/10


Numancia: Edu Navarro, Flaño, Jaio, Palacios, Felipe, Dimas, Barkero, Del Pino, Mikel Álvaro (Nagore, min.81), Asier (Balenciaga, min.59) e Iñigo Vélez (Goiría, min.64).

Celta: Falcón, Hugo Mallo, Catalá, Jordi, Botelho, López Garai, Danilo (Michu, min.67), Trashorras (Jonathan Vila, min.86), Iago Aspas, Toni (Saulo, min.74) y Joselu.

Árbitro: Ceballos Silva, del comité extremeño. Amonestó a Dimas y Jordi,

Campo: Los Pajaritos


CRÓNICA

Ismael Falcón se ha convertido en el héroe celtiña esta tarde ante el Numancia, en un partido en el que el Celta evidenció cierto cansancio, especialmente en los jugadores más ofensivos.

Eusebio puso en liza a un buen equipo en Soria. Finalmente dejó a Vila en el banquillo y decidió colocar a López Garai como pivote defensivo, con Danilo por delante. También volvió a recurrir a Trashorras, Aspas y Joselu, que hacía mucho tiempo que no jugaban juntos por la ubicación de Aspas en la banda, que no convence a Eusebio. Botelho volvió al lateral izquierdo.

El Celta comenzó el partido como acostumbra. Buscando el gol a base de posesión de balón y en busca de la inspiración de Trashorras o Aspas. El Numancia, un equipo muy bien entrenado, buscando alguna opción a la contra, y si bien el Celta tenía un mayor dominio del balón, que no del juego, las mejores ocasiones las puso el Celta.

En una de ellas, Iñigo Vélez pudo adelantar a los sorianos tras una indecisión de Catalá que Falcón tuvo que detener con instinto felino. En el rechace de la jugada se volvió a producir otro malentendido entre el propio Falcón y Catalá, que por fortuna, no aprovechó Vélez.

Fue el mismo Vélez quién tuvo otra ocasión unos minutos más tarde tras un pase en vaselina, donde la defensa celtiña no guardó la linea. Esta vez Catalá estuvo muy rápido e interceptó el balón cuando Falcón estaba batido.

Como deciamos, el Celta tenía más balón, pero no creaba mucho peligro ante la sólida defensa soriana. Toni, obligado a jugar a pierna cambiada apenas generaba peligro y a Aspas le costaba aparecer. Botelho, que andaba bastante vigilado, aprovechó un gran pase de Trashorras para plantarse en banda izquierda y centrar un balón raso, perfecto, para Joselu que no pudo rematar por un claro agarrón dentro del área. Ceballos Silva miró para otro lado y aquí no ha pasado nada. En la repetición se ve claramente que el agarrón, muy sibilino, es suficiente para impedir a Joselu rematar.


En la segunda parte cambió completamente el decorado. Los mejores jugadores del Celta acusaron el cansancio acumulado. Trashorras desapareció y el Celta perdió el control del balón, jugando a merced de un Numancia que buscaba el gol sin volverse locos. Los numantinos son un buen equipo, ya lo demostraron en Vigo. Se nota la mano del entrenador. No son un equipo que dé espectáculo, pero saben muy bien hasta donde pueden llegar.

Lo que hizo el Numancia tuvo mucho mérito, ya que consiguió volcarse sobre la meta de Falcón sin descuidar la defensa. El Celta, por su parte, se defendía como gato panza arriba. Las indecisiones de la defensa fueron constantes en esta segunda mitad, permitiendo al Numancia generar ocasiones de gol con bastante facilidad.

Y ahí emergió la figura de Falcón, como salvador del Celta. Suyas fueron las mejores paradas de la noche, alguna de ellas de especial dificultad y otras espectaculares, como un disparo desde fuera del área que sacó con reflejos felinos. El meta gaditano no vivía un gran momento y aprovechó para reivindicarse esta tarde.

A cinco minutos del final, Eusebio decidió cerrar el partido, dando entrada a Jonathan Vila en sustitución de un agotado Trashorras, que se quedó sin gasolina en la segunda mitad. El Celta consiguió algo muy interesante, ya que terminó el partido en el área numantina y gozó de ocasiones en la parte final, en las botas de Michu, que se precipitó tras una buena dejada de Aspas, o con Botelho, cuyo tiro lejano salió bastante desviado. La última ocasión llegó en un córner botado por Aspas, con cabezazo de Jordi, que salió desviado por muy poco.

El Celta no mereció mayor premio que el empate computando todo el partido, si bien es cierto que fue mejor en la primera mitad y que el árbitro le escamoteó un penalti. Con todo, ningún componente de la plantilla celtiña se quejará por el punto conseguido.

Como siempre, cuando se consigue un empate a domicilio, hay que validarlo en el siguiente partido en casa con una victoria. El empate será bueno si se gana al Salamanca. Tiene su mérito ante uno de los mejores equipos de la categoría. Seguimos con el problema del gol, incluso hoy ni tan siquiera se generaron muchas ocasiones. Confiemos en que sea producto del cansancio. Este mes de enero ha sido muy intenso, demasiado para una plantilla muy joven.